viernes, 25 de octubre de 2024

VOCABULARIO DEL CANTERO


VOCABULARIO DEL CANTERO
Albardilla
El DLE de la RAE define albardilla como <<Caballete o tejadillo que se pone en los muros para que el agua de la lluvia no los penetre ni resbale por los paramentos>>
En nuestro pueblo se conoce como albardilla la piedra o losa con la que se remata una pared para evitar que el agua de la lluvia penetre en la propia pared y la 'defarate '. Podemos apreciarlas en las paredes de casi todos los caminos que salen del pueblo. Por desgracia, parece ser que estas paredes no gozan de una cierta protección que las haga perdurar en el tiempo y para disfrute de los que nos sucedan.


Marrajo
Piedra grande y alargada que se utilizaba antaño en las estructuras de pozos, norias, etc.; así como de pasaderas en arroyos, sobre todo en el arroyo del Tío Pepe. Recuerdo que en el callejón del Lobo había dos de estas piedras para cruzarlo. 
📷
F. Manzano.



Gabarro
La definición en el DLE de la RAE es: <<1. m. Nódulo de composición distinta de la masa de la piedra en que se encuentra encerrado>>. Aquí lo conocemos por ese lunar o mancha negra que se observa en el granito y que normalmente se ha desechado para algunos trabajos por considerarlo como un defecto.



Empiedro
Conjunto de piedras que forman un molino de aceite o molino de rulo. Sistema que sustituiría al molino romano de piedras cilíndricas por conos de piedra truncados.


Perigallo
Aprendiz de cantero. Lunes día 21 de agosto de 1972: Concurso de Labra de Piedra entre aprendices en la plaza de España, para proclamar <<Perigallo>> de la Villa...

domingo, 11 de agosto de 2024

 PREPARATIVOS PARA LAS FERIAS DE 1928 Y 1930, EN LAS CRÓNICAS DE ISAIAS CORONADO




Se hacen los preparativos para la próxima feria…


Sí, la feria está próxima, sólo falta poco más de una semana para que dé comienzo, pero no vamos a hablar de la feria de este año 2024, sino de aquellas que se celebraban en las primeras décadas del siglo pasado. Y lo haremos a través de las crónicas de Isaías Coronado, corresponsal del Correo extremeño, en el año 1928 y 1930. En ellas veremos, y como ya sabemos, cuales eran los lugares donde se concentraban los festejos: la plaza de España o plaza de la Constitución, como se denominaba por entonces, y el Parque o plaza de Hernán Cortés, nombre que permanece en la actualidad. Lugares que, como aún se sigue haciendo, se engalanaban con el tradicional alumbrado eléctrico. Nos habla de un “teatro de verano salón” denominado “Plus Ultra” que, hasta el momento, no podemos ubicar y en el que anuncia la representación de Tambor y Cascabel, de Serafín y Joaquín Álvarez Quintero. Y, como no, las referencias a la celebración del tradicional rodeo para el que se han construido dos pilares junto al pozo ya existente y que servirá para que el ganado concurrente pueda abrevar de forma satisfactoria.
 
               <<La tradicional feria de Nuestra Señora de los Milagros, que como es sabido se celebra en ésta los días 20 al 24 ambos inclusive de los corrientes, promete tener este año, inusitado esplendor en la parte de festejos, pues habrá conciertos por una importante banda, y las plazas de la Constitución y Hernán Cortés, se han iluminado con profusión de luces eléctricas y a la veneciana, luciendo por vez primera los potentes focos que para estos casos figuran en el contrato de alumbrado que tiene hecho el Ayuntamiento.
            Actuarán en el teatro de verano y salón Plus Ultra dos importantes compañías dramáticas, y como fin de fiesta, una artista de primer orden del arte coreográfico y el cuplé.
            En el primer teatro hará el debut la compañía que actuará con la preciosa obra de los Quintero “Tambor y cascabel”.
            El importantísimo rodeo ofrecerá este año grandes reformas, para comodidad de los ganados que concurran, siendo la más notable dos hermosos pilares, con abundantes aguas de excelente calidad, para que pueda con toda comodidad y amplitud abrevar el ganado mayor y menor, pues para cada clase se ha dispuesto convenientemente uno.
               El pozo que hace años se construyó en el rodeo, tiene éste instalada potente noria, con la que el agua estará en cantidad y calidad a gran altura. El citado pozo ha sido cubierto para evitar penetre el polvo, y de los brocales para abajo recubierto de cemento más de un metro, para evitar que reviertan en él las aguas que en su derredor se derramen.
               El ganado superará en cantidad al del año anterior, y las transacciones serán muchas, a juzgar por el número de compradores que, en particular de Andalucía, tienen pedidas habitaciones en los hoteles y anunciada a su llegada otros a los amigos de aquí.
               Así, la feria de este año no desmerecerá de su brillante historial; muchos negocios durante el día y diversión constante en la noche. Ánimo, y a hacer provisiones de energías y de dinero, que donde gastar unas y otro no ha de faltar.
               La parte religiosa no desmerecerá en nada del esplendor que a la parte profana se dedica.
Isaías CORONADO>>
(Correo extremeño. 18/08/1928. Núm. 7623. BVPH).
 
<<PREPARATIVOS PARA LA FERIA
               Por la Comisión de Festejos se hacen importantes gestiones para que la feria de este año tenga inusitado esplendor y grandes atractivos para los forasteros que nos honren con su visita y de grato solaz y esparcimiento para los habitantes de la población; a más de grandes iluminaciones en las plazas de la Constitución y Hernán Cortés dará conciertos la banda del regimiento Gravelinas u otra militar si a ésta no le fuera posible su actuación en las fechas del 20 al 25 de agosto, que, como es sabido, tiene lugar nuestra importante feria.
               Siendo de gran importancia esta feria para toda clase, de ganados, no se regatean facilidades para que los granjeros puedan alojar sus ganaderías cómodamente, y al efecto tengan abundantes y gratuitos pastos en la Dehesa Boyal, próxima al sitio donde el rodeo se celebra; en éste hay gran charca en el centro, a más de un magnífico pozo con potente bomba, que surte de agua a un hermoso pilar y a enormes pilones, donde con toda facilidad pueden abrevar las diferentes clases de ganado que concurran.
               Dadas las disposiciones de las autoridades y pueblo en general, puede garantizarse que este año el importante certamen de compraventa será un éxito indiscutible y una gran oportunidad, que aprovecharán todos los que tengan que hacer transacciones en uno u otro sentido.
               A medida que se vayan conociendo detalles los comunicaré a CORREO EXTREMEÑO para tener al corriente a sus simpáticos lectores>>
(Correo extremeño. 13/07/1930. Núm. 7692.Pág. 4. BVPH).
 

sábado, 3 de agosto de 2024

¿SABÍAS QUÉ?


¿SABÍAS QUÉ?
El objeto de color blanco y forma redondeada que se aprecia en esta foto antigua de la iglesia, situado entre el arco de la portada y el escudo, es una placa con la figura de Jesús y la leyenda "REINARÉ EN ESPAÑA".
Desconocemos la fecha en la que se puso y debió ser arrancada durante la guerra civil, pues no tenemos constancia de que fuera antes. A pesar de que ya en 1932, siendo alcalde presidente de la Corporación municipal Tomas Aquino Barquero Barquero, se pedía su retirada: <<El concejal D. Manuel Martín Orellana, interesa al Sr. Presidente haga desaparecer la imagen de Jesús y su rótulo que dice "Reinaré en España", puesto en la parte exterior de la puerta de la Iglesia (sic) de esta villa. La Presidencia contesta que se informará si tiene derecho o competencia para poder hacerlo, tomando en consideración la petición>> (Libro de Actas del Pleno, 1929-1933. Sesión Ordinaria del día 6 de octubre de 1932).




¿SABÍAS QUÉ?
Este curioso petroglifo con una serie de líneas rectas y curvas, y tres cazoletas, se encuentra junto al río Ortiga, entre el camino de La Guarda y el molino de El Tejar. 





¿SABÍAS QUÈ?
Hace tres años se produjo un extraño fenómeno: la laguna de la cañada del Conejero se teñía de rojo, produciéndose la mortandad de los peces.




¿SABÍAS QUÉ?
Este mural se encuentra en la fachada lateral de la vivienda núm. 9, en la avenida de la Cruz. Obra de los artistas grafiteros Manuel Bravo Guerrero, 'Bisho' y Rocío Cruz Fernández, 'Rochihiro'.




¿SABÍAS QUÉ?
En el año 1930, don Juan Pedro Chacón, en su nombre y el de otros jóvenes de la localidad, solicitaba al Ayuntamiento les fuera concedido un trozo de terreno en el Ejido para usarlo como campo de fútbol en el cual ya practicaban este deporte:
<< Discutido previamente la solicitud de D. Juan Pedro Chacón, que por sí y en nombre de varios jóvenes de la localidad, solicita se le conceda un trozo de terreno en el Ejido municipal para campo de juego Football (sic) y que provisionalmente tiene establecido en dicho sito para ensallo (sic) y entrenamiento de este deporte, acordándose por unanimidad que se conceda por dos años en concepto de arriendo y pago anual de veinticinco pesetas>> (Acta de pleno de fecha 25 de agosto de 1930).
Foto: Athletic Quintanense, años treinta.



¿SABÍAS QUÉ?
En el lugar que ocupa la Guardería estuvieron las Escuelas del Camino de Zalamea.



¿SABÍAS QUÉ?
La actual plaza de Hernán Cortés, además de ser conocida por plaza del Pilar, fue denominada como plaza de Santa Clara.
<<... dicha casa está frontera de la cruz de piedra que está en la plaza del Pilar, que llaman de Santa Clara, y hace esquina a dicha plaza del Pilar y lindan con casas de Juan Barquero Gómez vecino de esta villa...>> (Escritura, año 1712).



¿SABÍAS QUÉ?
La I Vuelta Ciclista a Badajoz pasó por Quintana de la Serena

La primera vuelta ciclista a la provincia de Badajoz se celebró en el año 1935, efectuándose la salida de la primera etapa en la plaza de la República de la capital pacense el día 8 de octubre. El recorrido total sería de 450 kilómetros dividido en cinco etapas. El paso por Quintana de la Serena sería durante la cuarta etapa: <<Castuera -regreso al empalme-, Quintana de la Serena, La Haba, Villanueva de la Serena, Don Benito, Medellín, Santa Amalia, San Pedro de Mérida y Mérida>>. En total 106 kilómetros.

¿SABÍAS QUÉ?
Uno de los encastes más conocido y de prestigio en el mundo de los criadores de reses bravas, perdurando hasta hoy en ganaderías como las de Benítez Cubero y Marcelino Acosta, fue creado por un quintanejo en el siglo XIX.

Foto: Ángel Martín Quintana, "Ángel Quintana". Publicada por José María Cruz Solís, en el grupo de Facebook Cosas de Quintana de la Serena. Quintanej@s Nabú@s, 13 de junio, 2012.

¿SABÍAS QUÉ?
Posiblemente los eucaliptos de la Laguna y de otros lugares (la Ermita, la Carretera) se plantaron con motivo de la celebración de la "Fiesta del Árbol".


¿SABÍAS QUÉ?
El callejero de Don Benito tiene una calle dedicada a nuestra localidad. Desde 1997, la calle que empieza en la del Pino y termina en la de San Marcos, en el barrio de San Gregorio, lleva el nombre de Quintana de la Serena.



¿SABÍAS QUÉ?
El silo de Quintana se construyó en la segunda mitad de los años cincuenta.

Fotos: Momentos de su inauguración. Creo que inéditas, cedidas por C. Chacón.

¿SABÍAS QUÉ?
Tenemos un evento galguero en nuestro pueblo, el Concurso Morfológico de Galgos Español. Que mejor día que éste para preguntarnos si su dueño, Agustín, recuperó el galgo extraviado hace ya muchos años...
El anuncio aparecía en el Boletín Oficial de la Provincia de Badajoz de fecha 12 de junio de 1935:
<<Don Antonio Ortiz de la Cruz, segundo Teniente Alcalde en funciones del Ayuntamiento de esta villa.
Hago saber: Que según participa el vecino de ésta Agustín Bravo Romero, le fue extraviado el día 1 o 2 del presente mes un perro galgo, negro, cuello blanco, de cinco meses, teniendo las uñas de dentro recortadas de las manos.
Lo que se hace público para general conocimiento rogando al tenedor lo presente a esta Alcaldía para devolverlo a su dueño.

Quintana de la Serena a 6 de Junio de 1935.- El Alcalde, Antonio Ortiz.>>

Foto: "El enigma sin fin", Salvador Dalí, 1938. Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía de Madrid.








viernes, 24 de mayo de 2024

UN MOLINO OLVIDADO

 UN MOLINO OLVIDADO


Sin duda el edificio más atractivo del municipio de Fuente del Arco (Badajoz), situada en las proximidades del límite con la provincia de Córdoba es la conocida como Capilla Sixtina de Extremadura, la ermita de la Virgen del Ara. Ésta se encuentra en medio de extensos y centenarios olivares próximos a la sierra de la Jayona, que forma parte de las estribaciones de Sierra Morena. 


Anejas a la ermita se disponen una serie de construcciones que, aunque en estado descuidado y ruinoso, nos sorprenden por su valor etnográfico permitiéndonos apreciar la existencia en otros tiempos de una actividad agraria basada en la producción de aceite. Encontramos un molino del que parece haber referencias ya en el siglo XVI y en el que se aprecian restos de tres prensas -hoy desmanteladas- y partes de sus elementos de madera dispersos por el interior del edificio. Éste se divide en dos zonas: la de prensado y la de almacenamiento. 



En la primera, con cubierta a tejavana de palos de madera y cañada, se aprecian las bases circulares de las prensas en obra de ladrillo cocido; una de mayor tamaño que las otras dos. Por otra parte, aparece un pesebre que delata la reutilización del lugar, una vez cesada su actividad. En la puerta de entrada dispone de un pequeño techo sostenido por restos de madera procedentes del sistema de prensado.



En la zona de almacenamiento se disponen los depósitos cuyas bocas se cubren con tapas de madera. Anchos pilares sostienen las bóvedas en las que podemos apreciar escudos recordándonos la presencia de la Orden de Santiago en este lugar. 




Entre las dependencias del molino, la casa o cortijo de la finca y la entrada de visitas a la ermita, se encuentra un corral o patio en el que se disponen algunas piedras que ejercieron su función en el prensado de la aceituna.

martes, 30 de abril de 2024

OFICIOS DE ANTAÑO: HORTELANOS, ARRIEROS Y CURTIDORES EN QUINTANA DE LA SERENA

 




OFICIOS DE ANTAÑO: HORTELANOS, ARRIEROS Y CURTIDORES En quintana de la serena  

 

JUAN FRANCISCO JOSÉ DÁVILA SÁNCHEZ





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ÍNDICE

INTRODUCCIÓN

 

I.                LA HUERTA COMO SEÑA DE INDENTIDAD. POZOS, NORIAS Y ALBERCAS

 

I.2. POZOS

I.2.1. Toponimia

 

I.3. ALBERCAS

I.3.1. Toponimia

I.3.2. Conjuntos pozo-canal-alberca

 

I.4. NORIAS

I.4,1.Tipos de norias

I.4.2. Fabricantes

I.4.3. Elementos mecánicos

I.4.4.Tipos de estructuras

I.4.5. Norias de plataforma circular al borde del pozo

I.4.6. Norias de plataforma circular sobre el pozo

I.4.7. Norias con plataforma de postes y viga

I.4.8. Norias de estructura singular

I.4.9. Norias de plataforma desconocida

I.4.10.Torretas

I.4.11. Pilas y pilones

 

I.5.-LA HUERTA

I.5.1. Toponimia

I.5.2. Cultivo de nabos

I.5.3. Huertos familiares

 

II.              EL OFICIO DE ARRIERO 

 

III.            INDUSTRIA DEL CURTIDO   

 

III. 1. El oficio de curtidor

III. 2. El último curtidor

 

IV.            EL COMERCIO DE PIELES Y LANA 

IV.1. El oficio de pielero (pellejero)

 

V.               OTROS OFICIOS PERDIDOS

 


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INTRODUCCIÓN

Quintana de la Serena no solo ha sido un pueblo de canteros. Hoy, la industria relacionada con la extracción de la piedra y su comercialización es de una importancia vital para el mantenimiento socioeconómico de esta localidad, considerándose su principal riqueza. Pero no siempre fue así. A lo largo de la historia en este pueblo se han desarrollado otras actividades de importancia como fueron el cultivo de las huertas, la arriería y la industria del curtido. Si bien es cierto que el oficio de cantero ha estado presente en Quintana desde tiempos inmemoriales, no tuvo nunca el auge que ha tenido desde las últimas décadas del siglo pasado; siendo, sin embargo, los oficios de hortelanos, arrieros y curtidores, los que en épocas determinadas disfrutaron de un gran potencial económico. Así pues, nuestro trabajo se centrará en estas tres actividades menos conocidas por los habitantes de esta población. La huerta como seña de identidad de nuestro pueblo y con ella los numerosos pozos excavados en aquellas zonas donde la capa granítica lo permitía; las norias, como medio de extracción entre la utilización del cigüeñal y el motor de gasolina, y las albercas, como depósitos de agua; la arriería, como una de las actividades a las que se dedicaría un importante número de personas del pueblo; y, por último, el curtido de pieles, con las numerosas tenerías que hubo en Quintana.

Con este trabajo pretendemos sensibilizar de la importancia patrimonial y el interés que, desde una perspectiva etnográfica y etnológica (Agudo y Santiago, 2006: 23), así como histórica, didáctica y cultural, tienen estos conjuntos que formaron parte de una tradicional forma de aprovechamiento de las aguas en una actividad tan singular en nuestro pueblo como fue la huerta.  Una actividad que ha generado una serie de construcciones que forman parte de la arquitectura tradicional o vernácula (Ibidem, p. 24); una serie de <<organizaciones arquitectónicas>> que se integran en la denominada <<arquitectura del agua>> (García Grinda, 2006). Por ello, aunque centraremos nuestro trabajo en la huerta y los elementos relacionados con la misma, incluimos algunos otros elementos de la arquitectura tradicional vinculados al agua que forman parte de esa arquitectura: pozos, albercas, pilas y pilones.

 

I. LA HUERTA COMO SEÑA DE INDENTIDAD. POZOS, NORIAS Y ALBERCAS.




 

Taconeando

vienen las yeguas

cantarillos de lata

con agua fresca.

 

Un rayito de sol

en el pozo abandonado

brilla el caldero oxidado.

 (Isabel Escudero)


I.2. POZOS

 Un pozo, como todos sabemos, es un hoyo de grandes dimensiones que se hace en el terreno intentando llegar al nivel freático que, excepto en los pozos surgentes, siempre se encuentra en una cota inferior a la del suelo; y así disponer de agua, tanto para el abastecimiento de las personas y los animales, como para regar las numerosas huertas que existían en nuestro pueblo.  

    Antiguamente, estos pozos se hacían manualmente, con pico y pala, cavando y sacando la tierra hasta encontrar la suficiente cantidad de agua que permitiera seguir trabajando en él para darle una mayor capacidad de almacenamiento. A veces, el trabajo se veía frustrado y había que desistir por no encontrar el preciado líquido y volver a tapar el hoyo. Más tarde, aparecieron máquinas que por medio de una pala mecánica extraían la tierra y en poco tiempo conseguían hacer la concavidad, dándole mayor profundidad y anchura. Era conveniente forrar el vaso del pozo con una pared de piedra para darle mayor consistencia y evitar el derrumbe de tierra.



          

Paredes de pozos empedrados utilizando la técnica de piedra seca


Algunos, sobre todo aquellos que iban a ser destinados al abastecimiento de agua para uso humano, se remataban con un brocal de piedra disponiendo de una carrucha que pendía de un arco de hierro y provistos de un cubo cilíndrico de chapa metálica con base de madera para facilitar el llenado del mismo por el efecto de flotación y la consiguiente inclinación de la boca. Ahora, los pozos suelen hacerse de sondeo perforando la tierra, incluso la roca, alcanzando grandes profundidades y extrayendo el agua por medio de bombas mecánicas.


                           
     Cubo
                                                                      Carrucha


Quizá la forma de extracción más antigua, aparte de la manual con un cubo atado a una cuerda, sería con cigüeñal, hoy en desuso: <<Que hai ocho guertas, que se riegan con zigueñales…>> (Respuesta a la pregunta número 36 en el Interrogatorio de la Real Audiencia de1791.); <<… en muchas huertas todavía se emplea el primitivo cigüeñal, que data de la dominación musulmana, medio lento y antieconómico, y aun cuando se van instalando motores de gasolina para la elevación del agua, no son suficientes ni económicos>> (Casco Arias, 1961: 256). Como nos dice Caro Baroja: <<De todos los aparejos para elevar agua de una manera artificiosa el más antiguamente conocido en el mundo oriental y mediterráneo fue, al parecer, el cigüeñal>>, indicándonos al mismo tiempo su representación en pinturas egipcias y bajorrelieves asirios; así como su utilización por los pueblos de la Antigüedad clásica, siendo su área de difusión inmensa (Caro Baroja, 1983: 411).

 

Después se emplearía la noria, para seguir con métodos más modernos a base de bombas manuales, motores de gasolina o bombas eléctricas. Todavía, dentro del casco urbano podemos observar algún cigüeñal como el que se encuentra en los extramuros de la carretera de Valle de la Serena; y, con resto de una instalación a base de bomba manual, el pozo que se conserva en la entrada del Parque Nuevo y en la Viña de don Carlos Barquero. La utilización de nuevos métodos de extracción de agua, como la noria, no solo supuso un incremento en el volumen extraído en menos tiempo, sino un aumento en la seguridad. A veces, ocurrían desgraciados accidentes por rotura de la cuerda o cualquier otro elemento del cigüeñal, como nos cuenta Gregorio Algaba: <<En 1898, estando mi bisabuela Elvira, embarazada de mi abuela Nicanora, y estando mi bisabuelo, Nicanor, regando con el cigüeñal, se partió el horcón cayéndole la pértiga encima y tirándolo al pozo. Nadie sabe si murió del golpe recibido o ahogado, la cosa es que tres días tardaron en sacarlo del interior del pozo, en el paraje hoy conocido como la huerta de Bichín. Mi abuela no conoció a su padre, nació a los dos meses de morir este, de ahí que a ella le pusieran de nombre Nicanora, como su padre>>.


 

Cigüeñal (cubo, contrapeso de piedra y horquilla)

 Los pozos siempre han estado relacionados con accidentes de los que tenemos una muestra en la documentación consultada; unos con resultados desgraciados y otros, afortunadamente, se resolvieron con el salvamento de la persona. Como el caso del niño de diez años, Alfonso Murillo García, que pereció ahogado en el pozo situado en la finca denominada Huerto del Rucio el día 9 de julio del año 1924 (Correo de la mañana. Núm. 3230.15/07/1924 BVPH). También el caso de la mujer que, según nos contaba Victoria Ortiz, cayó al pozo de una casa de la calle Nueva y fue salvada por los hombres que se encontraban en la fragua próxima: <<Mi madre siempre contaba que oyó el golpe y salió corriendo a pedir ayuda a la fragua y que uno de estos hombres tuvo la buena idea de coger una soga con la que se ató y se metió en el pozo sujetado por los otros y pudieron sacar a la muchacha con vida y que quedara todo en un gran susto>>. Otro suceso fue el de la joven que tras caer a un pozo sería salvada por el cabo de la Guardia Civil, Francisco Puerto Marín, y el guardia segundo, Gregorio Martín de la Peña. El suceso tuvo lugar sobre el mediodía del 12 de agosto cuando se encontraban en una huerta en la Cañada de las Cruces y oyeron a un niño pedir auxilio porque su hermana María Francisca, de 14 años, se había caído al pozo mientras se encontraba sacando agua. Según cuenta la crónica de la época: <<… sin vacilación alguna y sin reparar el peligro que ofrecía el pozo dada las condiciones del mismo, puesto que media de profundidad unos ocho metros y de ellos cinco con agua, el cabo Puerto despojándose de sus ropas exteriores y auxiliado por el guardia que le acompañaba descendió al interior del pozo, teniendo la suerte de cogerla por un brazo a la joven citada en uno de los momentos precisos que subió a flote>> (Nuevo diario de Badajoz. 19/08/1902. Núm. 3023, pág. 2. BVPH).

Otro modo de sacar agua de los pozos fue la utilización de bombas aspirantes. <<Las bombas, cuya generalización data del siglo pasado, tienden a sustituir a las norias […] Diremos, sin embargo, comprobando una idea anterior que, para sacar agua con una bestia en los campos y aldeas, es preferible la noria a todas las demás máquinas […]>> (G. Vicuña, 1874: 36). Como ejemplos, en las fotografías de abajo, vemos que en el pozo situado en la calle Don Juan de las Máquinas, dentro del parque, se utilizaría una bomba aspirante impelente a palanca, y en el otro vemos un cabezal para pozo profundo. Ambos modelos aparecen en el catálogo de 1922 de la fábrica valenciana Bombas IDEAL, que había empezado a fabricar bombas en 1902.

 



Existen algunas casas que aún conservan el antiguo pozo del que disponían en el patio o corral, y que servía para el abastecimiento del ganado y la limpieza doméstica. En algunos casos, curiosamente se produce el hecho de que un pozo podía ser compartido por dos viviendas, al encontrarse situado, más o menos, en la mitad de la pared divisoria de ambas casas. No se utilizaban para el consumo humano porque, como nos dice Casco Arias, las aguas de estos pozos se encontraban contaminadas: <<Son abundantísimas, a escasa profundidad y potables a excepción de las del pueblo que están cargadas de gérmenes y materia orgánica>> (Casco Arias, 1961: 39-42). Pero sí cubrían algunas necesidades como hemos dicho anteriormente: el aseo personal, el fregado de los utensilios de cocina o el lavado de la ropa y, sobre todo en verano, para mantener fresca el agua de beber y otras bebidas y alimentos como la sandía y el melón; además, servía para dar de beber a las bestias y otros animales que se criaban en los corrales, como gallinas, cerdos, etc.; también, para fregar los suelos y regar las macetas.

Además, la población podía utilizar el agua de los pozos que se encontraban en algunas calles y que aparecían como suministradores públicos, como el famoso Pozo Dulce que diera nombre a la actual Plaza de Extremadura. Había otro pozo en la calle Cacería, en la que también podemos ver un simulacro –aunque en el original el brocal era cuadrado-, recordando la existencia de aquél y situado casi en el mismo lugar donde se encontraba. Hubo también otro en esta misma calle en el ensanche de enfrente del edificio de la Casa del Pueblo, que ya en los años sesenta se encontraba cegado.

               


Junto con estos pozos repartidos por las calles del pueblo existía un pilar en la actual plaza de Hernán Cortés (Parque Viejo) que servía de abrevadero para el ganado. Era frecuente realizar un encañado desde aquellas fuentes o manantiales para el abastecimiento alejados de los lugares más transitados o accesibles para los vecinos que se servían del espacio para que bebieran sus caballerías y ganado. Así, aquel pilar se surtiría de las aguas procedentes de una fuente o pozo situado en la calle Mártires, desde donde partiría una cañería que discurriendo por la calle Cagancha llegaría a la plaza de Hernán Cortés, donde también se encuentra un pozo dentro del parque: <<Otro poço avia del dicho pilar que esta cubierto y esa agua va encañada al dicho pilar>> (Visitación… 1595); <<Para el abrevadero del ganado había, dentro del casco urbano de la población, en el año 1840, cinco pozos y un pilar, y los vecinos se abastecían del agua potable de los pozos de las huertas. El pilar estaba situado en la actual plaza de Hernán Cortés, en el centro del parque; las aguas venían por cañería de un pozo de los extramuros situado en las traseras de las primeras casas de la calle de los Mártires, siendo esta conducción antigua>> (Casco Arias, 1961: 39-42).

 De la existencia y construcción de aquellas cañerías, ya en tiempos de los romanos, nos habla Vitrubio en sus libros de arquitectura, habiéndose encontrado indicios de sus restos durante las últimas obras de acondicionamiento de la calle Caganchas: <<… se harán tubos de barro cuyo grosor no sea menos de dos dedos y de suerte que uno de los extremos sea más estrecho, con el fin de que pueda encajarse dentro del otro. Las junturas se han de cerrar con cal diluida en aceite” (Libro Octavo, Capítulo IV, “De los modos de conducir el agua”).

Encontramos en la documentación referencias a los pozos que había en Quintana en 1595: <<Y poço que llaman el poço de Quintana en la calle que va de la villa de Campanario a la de Zalamea y el poço tenia un cigüeñal que sacaba el agua que iba a un pilar para las caballerías. Otro poço avia del dicho pilar que esta cubierto y esa agua va encañada al dicho pilar>> (Visitación… 1595). A finales del siglo XVIII, había cuatro o cinco pozos en el pueblo para el abastecimiento de personas y animales que, tanto Agúndez como Madoz, los nombran por fuentes en número de cinco cada uno de ellos, mientras en el Interrogatorio de la Real Audiencia se citan cuatro: <<Que hay también quatro pozos y un pilar para el surtido de personas y caballerías…>> (Interrogatorio de la Real Audiencia, 1791). En 1849, Pascual Madoz: <<No sirviendo sino para los ganados 5 fuentes y un pilar que hay dentro de ella>>.

Desde antiguo, estos lugares (pozos, ríos y lagunas) han sido muy cuidados por ser parte esencial y vital en la supervivencia de los grupos humanos. A finales del siglo XV, vemos como se establecen las normas que han de regir para que el agua esté limpia y sea apta para el consumo de personas y bestias: [19] Título de las lagunas, pozos y ríos : Otrosí, por quanto las lagunas, pozos y ríos de los lugares de la dicha villa de Magacela son muy necesarios para las bestias e conviene que se guarden con mucha diligencia para que el agua esté limpia para las dichas bestias e no se eche en ellas ninguna cosa para las dañar ni se haga en esto cosas de que pueden a personas e bestias recevir peligro, ordenaron e mandaron que agora, e de aquí adelante, ninguno sea osado de echar madera en las dichas lagunas, ni palos ningunos, ni sarmientos, ni vencejos, ni juncos, ni otras cosas en las dichas lagunas, ni menos puedenlo hacer en pozos que en ellas, porque los dichos pozos se rescrecian peligrosamente después que se hinchan las dichas lagunas, so pena que el que echare la dicha madera incurra en pena de seiscientos maravedís y el que echare sarmientos, o juncos, o vencejos, o otras cosas semejantes [Fol. 24r], o lavare paños o mieses incurra en pena de sesenta maravedís por cada uez y el que [lo] hiziere [en] pozos incurra en pena de seiscientos maravedís. Otrosí, porque del beber de los ganados menudos, ansí como puercos, y ouejas, y carneros, y cabras dañan las dichas lagunas, hordenaron e mandaron que agora, e de aquí adelante, ninguna persona sea osado de dar agua en las dichas lagunas a puercos, ni carneros, ni ouejas, ni cabras, ni borregos, y el que lo contrario hiziere; si fuere rebaño de cada caveça sesenta maravedís; e si no fuere rebaño de cada caveça dos maravedís por cada vez (Miranda, 2003: 104. Transcripción recogida del autor).

          A finales del siglo XIX, encontramos la ley de agua de 1879 que regulaba la construcción de pozos privados: <<Art. 19. Todo propietario puede abrir libremente pozos ordinarios para elevar aguas dentro de sus fincas, aunque con ellos resultasen amenguadas las aguas de sus vecinos. Deberá sin embargo guardarse la distancia de dos metros entre pozo y pozo dentro de las poblaciones y de 15 metros en el campo entre la nueva excavación y los pozos, estanques, fuentes y acequias permanentes de los vecinos. Art. 20. Para los efectos de esta ley, se entienden que son pozos ordinarios aquellos que se abren con el exclusivo objetivo de atender al uso doméstico o necesidades ordinarias de la vida, y en los que no se emplea en los aparatos para la extracción del agua otro motor que el hombre>> (BOPB. núm. 391. Sábado, 5 de julio de 1879).

El uso y la conservación de los pozos públicos se encontraba regulado por las ordenanzas municipales: <<Merecerán la particular atención de las autoridades como medio de remover las causas generales de insalubridad: primero, la reparación, limpieza y curso expedito de los conductos de aguas sucias, de pozos inmundos, sumideros, letrinas, alcantarillas, arroyos, corrales, patios y albañales. Segundo el continuo y esmerado curso y aseo de las fuentes, calles, plazas y mercados…>> (BOPB Núm. 72. lunes, 17 de junio de 1867). Como medida de higiene, en la sesión de pleno de fecha 15 de abril de 1933, encontramos el requerimiento que hace la Alcaldía a los dueños de los pozos que venden agua potable, para que pongan brocales y no permitan sacar agua con cántaros. Concretamente, sabemos que el pozo de la Pepa ya existía a principios de los años treinta y al dueño de este pozo se le instaba desde la autoridad municipal para la desinfección o cierre del mismo por haber resultado del análisis expedido por el Instituto provincial de Higiene de Badajoz, la presencia en sus aguas del <<bacilo coli en menos de un cc.>> (Sesión de pleno, 18/02/1933).

Hasta la llegada del agua potable y la realización de la correspondiente red de distribución para el abastecimiento de la población, que se llevaría a cabo en los años sesenta, el agua utilizada para el consumo humano era la de algunos pozos que se encontraban en los extramuros, como los pozos de la Pepa, de doña Fuensanta, de la Fuente del Castillejo y Nuevo; además de usarse para beber el agua de fuentes y pozos de las huertas y fincas: <<Se abrieron varios pozos para facilitar agua potable a ciertos barrios de la población, tales como el camino de Zalamea, que carecían de ella a corta distancia>> (Barquero, 1979: 63). La falta de higiene en estos pozos ocasionaba algunos problemas en la salud de los habitantes de Quintana de la Serena, como bien nos transmite Casco Arias: <<Todos los años hay una intensa epidemia de disentería bacilar de mayo a septiembre y se producen numerosos casos de fiebre tifoidea, sobre todo durante los meses de agosto, septiembre y octubre, que baja el nivel de agua en los pozos, y, según el teorema de Herzen, la morbilidad por cada caso de fiebre tifoidea que se produce da cinco enfermedades más de otra naturaleza>> (Casco Arias, 1961: 267-268).